Para ello necesitamos un rodillo, utensilio que dominamos perfectamente, ya que estamos acostumbrados a usarlo con la plastilina.
Ha sido muy divertido y sorprendente, porque hemos conseguido hacer un bocadillo de nocilla muy diferente al que estamos acostumbrados a comer, sintiéndonos muy orgullosos de haber conseguido prepararnos la merienda con nuestras manitas y un poquito de ayuda de los papás y mamás.
Tenemos muchas ganas de seguir descubriendo nuevas recetas.
¡¡¡¡¡ Ya os contaremos !!!!!



No hay comentarios:
Publicar un comentario